Experiencia donde se muestra que es posible enseñar y aprender en cualquier “contexto” (sin dejar de lado todo lo que involucra: la misma escuela, alumnos, docentes, entorno comunitario, etc.) y de puertas abiertas a la comunidad, a las redes sociales, ya que en soledad no se puede, pero sí poniendo un “pensar” y un “hacer” desde lo colectivo y con diferentes miradas. Es necesario destacar las producciones de conocimiento de esas instituciones educativas, al igual que lo hizo Christine -una visitante ajena al centro educativo y a la comunidad, que visitó la escuela.
Se considera interesante plantear las palabras de Martinis: «deberíamos poder comenzar a nombrar a las instituciones educativas por aquello que producen (acceso a la cultura, circulación de saberes, concepción del sujeto de la educación como un igual) y no por el contexto en el cual se encuentran ubicadas» (Martinis, 2005).
La autora finaliza su artículo, reflexionando acerca de qué está pasando, qué imagen se está dando en cuanto a las condiciones de educación y calidad educativa que se brindan como para generar en otros “el asombro-la maravilla” ante buenas prácticas educativas en las escuelas públicas uruguayas, sobre todo aquellas pertenecientes al programa
A.PR.EN.D.E.R.