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Si bien hubo avances, es preciso seguir trabajando para que la mujer gane espacios de poder

La recuperación de espacios de poder  y el fortalecimiento del liderazgo sindical de la mujer fueron las principales conclusiones a la  que arribó la Conferencia Mundial de Mujeres de la Internacional de la Educación, que tuvo lugar entre los días 7 y 9 de abril en Dublin (Irlanda).

Uruguay estuvo representado por la secretaria general de la Federación Uruguaya de Magisterio – Trabajadores de la Educación Primaria (FUM-TEP), maestra Elbia Pereira.

En el desarrollo de la Conferencia, los grupos de trabajo discutieron y analizaron diferentes temas como el papel de las mujeres en la educación superior, la educación de las niñas, el currículo inclusivo y la incorporación de la perspectiva de género en la campaña de la Internacional de la Educación “Unámonos por la educación pública”, según reseña un comunicado de la institución.

También se hizo hincapié en la dimensión de género en la formación de los profesionales de la educación, incluyendo al personal de apoyo. El grupo latinoamericano está conformado por mujeres y hombres que han participado en casi una década de la Red de Trabajadoras de la Educación, una de las áreas de trabajo de la Internacional de la Educación para América Latina.

La vicepresidenta del Comité Regional de la Internacional de la Educación para América Latina, Fatima Silva, enfatizó que tras 10 años de la Red de Trabajadoras ha habido un cambio de perspectivas y se ha avanzado mucho.

En Brasil, por ejemplo, ha habido tres mujeres presidentas en distintos sindicatos de base. “Las mujeres siguen siendo mayoría en el magisterio pero minoría en los espacios de poder”, enfatizó Silva.

Agregó que las mujeres “tienen doble jornada de trabajo: en el sindicato y en la casa, y es difícil para ellas compaginar la vida personal y participación en el liderazgo sindical”, en declaraciones recogidas por la página oficial del evento.

En los distintos grupos de trabajo se abordaron aspectos como la inclusión de los temas de género en la agenda sindical general y la lucha por que las políticas de género sean adoptadas como políticas del sindicato y que esa mirada se incorpore de forma transversal a los temas sindicales, señala el comunicado oficial.

Asimismo, el empoderamiento de las mujeres se resaltó como de gran importancia y la capacitación de las mujeres no solo en temas de género, sino en temas sindicales a nivel general para que las mujeres puedan ocupar cada vez más espacios en las dirigencias sindicales.

Incluso las negociaciones colectivas deben incluir la perspectiva de género para que se incluya condiciones laborales de las mujeres. A veces las mujeres son penalizadas con normas hechas a la medida de los hombres, como en el caso de la educación superior que penaliza la ausencia por maternidad como un período no productivo.

Para la vicepresidenta mundial de la Internacional de la Educación, Juçara Dutra, “Los sindicatos siguen jugando un rol muy importante en su relación con las instituciones educativas y los gobiernos”.

“Con su poder de movilización y de presión siguen transformando las políticas publicas en sus países y regiones”, dijo la compañera Dutra.

Yamile Sokolovsky, integrante de CONADU, Argentina, y activa en el tema de la Educación Superior y en la Red de Trabajadoras, coordinó un p anel titulado “de las palabras a la acción” en el que se enfatizó el papel crucial de las “Redes de Trabajadoras” de la Internacional de la Educación.

En ese panel, la presidenta de la Canadian Federation of Teachers (CTF), Dianne Woloschuk, enfatizó su solidaridad con cada una de las trabajadoras de la educación.

Me solidarizo con cada una de vosotras y haré lo que esté en mi mano para expresar esa solidaridad siempre que sea necesario”, dijo y agregó que “ese poder de solidaridad se construye y canaliza a través de la Internacional de la Educación”.

Sokolovsky resaltó la importancia de “la palabra crítica” y su fuerza transformadora, para cambiar el mundo y citó a las madres de la plaza de mayo que nos han enseñado que “la única lucha que se pierde es la que se abandona”.

La lucha por la igualdad de género continua, pero eso no significa que no haya habido avances, se expresa en la página oficial del evento.